No hay duda de que las mejores cafeteras de cápsulas han cambiado la forma en que muchas personas preparan su taza de café por la mañana. Este tipo de cafetera se ha hecho muy populares, ya que ofrecen un café de barista de forma rápida, sencilla y que requiere el mínimo esfuerzo y acción por tu parte: todo lo que tienes que hacer es meter una cápsula, pulsar el botón y ¡ya tienes tu café!
Pero, al igual que con todos los electrodomésticos de la cocina, es importante mantener limpia tu cafetera de cápsulas para que siga funcionando bien y no afecte negativamente a la preparación, el sabor o el olor del café. Teniendo esto en cuenta, a continuación te explicamos cómo limpiar una cafetera de cápsulas, con un tutorial de cinco pasos y consejos de mantenimiento.
Antes de empezar el tutorial, es importante tener en cuenta que la mejor forma de limpiar una cafetera de cápsulas es siguiendo las instrucciones del fabricante. La forma de limpiar una cafetera Nespresso será diferente a la de un modelo De'Longhi o Dualit, así que asegúrate de consultar primero las instrucciones de limpieza de la marca que elijas. En general, el siguiente tutorial es la mejor forma de hacerlo:
Después de preparar el café del día, debes enjuagar la cafetera con agua para eliminar cualquier resto de bebida. Para ello, retira la cápsula usada de la cafetera (a menos que tenga un compartimento para cápsulas, del que hablaremos más adelante), vuelve a colocar el soporte en su sitio y abre el flujo de agua pulsando un botón o accionando un interruptor (los distintos modelos tienen controles diferentes).
Deja correr el agua unos segundos antes de apagarla. Esto no sólo mantendrá limpia tu cafetera de cápsulas, sino que facilita el cambio entre leches para evitar la contaminación cruzada, y evita que tu próximo café tenga un sabor raro.
A continuación, vacía el depósito de agua y la bandeja de goteo. Esto debe hacerse cada pocos usos para que el agua que utiliza la cafetera de cápsulas sea fresca y para que la bandeja no se derrame. Si no vas a descalcificar la cafetera de cápsulas, puedes volver a colocar las piezas en su sitio después de limpiarlos con agua y jabón.
Pero si vas a descalcificar, llena el depósito de agua con una solución descalcificadora (más información a continuación) y vuelve a colocarla. Asegúrate de retirar la bandeja de goteo para el siguiente paso y coloca un recipiente en su lugar.
Ejecutar un programa de descalcificación parece mucho más complicado de lo que es, y tampoco lleva demasiado tiempo. La descalcificación de una cafetera de cápsulas es algo que debes hacer con regularidad para evitar la acumulación de cal o minerales y garantizar que los elementos que calientan y las tuberías se mantengan en buen estado.
Para iniciar el proceso de descalcificación, utiliza un descalcificador o prepara una solución con una proporción 1:1 de agua y vinagre. Ponlo en el depósito de agua y, con un recipiente en lugar de la bandeja de goteo, pon en funcionamiento la cafetera para que el descalcificador enjuague y limpie las tuberías y elimine cualquier resto. Este paso puede realizarse un par de veces si la cafetera de cápsulas está especialmente sucia.
Tras el proceso de descalcificación, deja secar la cafetera durante una hora antes de vaciar el depósito y limpiarla a fondo. Llena el depósito de agua y vuelve a enjuagar la cafetera para eliminar los restos de vinagre. Vacía y vuelve a llenar antes de volver a colocarlo en su sitio junto con la bandeja de goteo.
Este modelo de cafeteras tienen un depósito para recoger las cápsulas usadas y no tener que tirarlas constantemente después de cada uso. Pero cuando la cámara se llene, asegúrate de retirar las cápsulas usadas (la mayoría se pueden reciclar) y tirar el agua o los restos de café. Limpia la cámara con agua tibia y jabón, y un trapo antes de volver a colocarla en su sitio.
Para eliminar cualquier mancha o huella dactilar del exterior de tu cafetera de cápsulas, pasa un trapo húmedo por el exterior para sacarle brillo. Y ¡listo!
Lo ideal es limpiarla cada tres meses: esto se refiere a una limpieza a fondo y descalcificación como el tutorial mencionado anteriormente. Pero después de unos cuantos usos, deberías cambiar el agua del depósito, tirar los restos de la bandeja de goteo y reciclar las cápsulas vacías.
La duración promedio de una cafetera de cápsulas está entre 5 y 10 años. Sin embargo, esto depende del fabricante y del modelo que tengas, así como de la frecuencia con la que la utilices. La mayoría de los fabricantes ofrecen amplias garantías, por lo que si tu cafetera se daña o rompe, deberías poder cambiar sus piezas u obtener una sustitución completa.
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