No se puede ocultar, es seguro decir que la PS5 ha ganado la guerra de consolas de esta generación. Incluso se ha rumorado que Microsoft podría adelantar la próxima generación.
Ahora bien, la Xbox Series X sigue siendo una consola increíble. Ha ayudado a introducir a los jugadores de consola en los títulos 4K a framerates suaves y (aunque quizás no lo suficiente) ha tenido algunos exclusivos excelentes. Eso sin mencionar el mayor argumento de venta de Xbox, Game Pass. El año pasado, Microsoft compró algunos de los estudios de videojuegos más importantes, por lo que es de esperar que lleguen al servicio muchos de los próximos títulos más importantes.
Así que, ya sea que veamos una actualización al estilo de PS5 Pro (¿Xbox Series X 2?) o una consola completamente nueva, aquí hay 3 actualizaciones que queremos ver en la próxima Xbox.
El control de la Xbox Series X es un kit perfectamente útil, y nos gusta mucho la versión Elite, pero comparado con el pad DualSense de la PS5 es un poco simple.
El control de Sony cuenta con una serie de funciones que aumentan la inmersión, como la resistencia adaptativa del gatillo y la respuesta háptica, que parecen simples trucos, pero que en realidad se han convertido en una parte importante de la experiencia de la consola. Nos encantaría que Xbox adoptara una tecnología similar. Imagínate disparar un láser Spartan en el próximo juego de Halo y sentirlo de verdad.
Llámanos superficiales, pero la Xbox Series X no tiene precisamente un diseño llamativo. Su estética se puede describir con una palabra: caja. De hecho, se parece a una torre de PC normal y corriente, es cierto que la PS5 es muy grande, pero la nueva PS5 Slim al menos le da cierta personalidad.
Por supuesto, con una consola, el rendimiento siempre va a ser más importante que la belleza, pero nos gustaría no tener que esconderla debajo de un escritorio por vergüenza.
En términos de rendimiento, queremos ver a Microsoft darlo todo esta vez. En esta generación, la compañía se ha visto obligada a garantizar que los juegos funcionen tanto en la Series X como en la Serie S, de menor potencia, por lo que algunos desarrolladores se han sentido incapaces de ofrecer el máximo a sus títulos.
Nos gustaría que Microsoft ofreciera la posibilidad de elegir entre una sola consola, o tal vez una con y sin unidad de disco, y en su lugar apostara por la potencia pura. Con consolas pensadas para durar años, nos encantaría ver compatibilidad con 8K a medida que se vaya generalizando en los mejores televisores.