El 2021 fue un año bastante ocupado para Nvidia, uno que llegó con una justa dosis de éxitos y emoción. Pero también fue un momento difícil para la compañía en muchos aspectos.
En este artículo, vamos a repasar las grandes victorias del equipo verde este año (como la RTX 3080 Ti y los avances realizados con GeForce Now, por mencionar un par de ellas). Así como los aspectos más complicados de 2021, como los niveles de existencias de GPU y la continua y notable ausencia de tarjetas gráficas Ampere de gama baja.
No será una sorpresa para nadie saber que Nvidia fue la fuerza dominante en el mundo de las GPU durante 2021. Según las cifras de la empresa de análisis Jon Peddie Research, el equipo verde tuvo una cuota de mercado de alrededor del 80 %; a veces un poco más, a veces un poco menos a lo largo del año (AMD se quedó con el resto).
Por lo tanto, el statu quo se mantuvo se mantuvo en este aspecto, aunque Intel siguió dominando fácilmente el segmento de las GPU para laptops (gracias a los gráficos integrados en la mayoría de computadoras portátiles que no tienen tarjeta gráfica dedicada, por supuesto). Team Blue podría dar un giro a la situación el año que viene con sus GPU Arc Alchemist, que se espera que representen un serio desafío para Nvidia, sobre todo en el segmento económico del mercado, pero nos estamos adelantando.
Nvidia ha mantenido este año su gran liderazgo en tarjetas gráficas de escritorio gracias a la calidad y el potente rendimiento que ofrece Ampere, tanto en su gama actual de GPUs, que salieron durante 2020, como en un nuevo modelo en particular que apareció en 2021.
En total, el equipo verde presentó tres nuevas ofertas Ampere este año, en concreto, la RTX 3060, que se anunció como opción de gama baja en el CES de enero, y las RTX 3070 Ti y 3080 Ti, más potentes, que se presentaron en mayo.
Esa RTX 3060 era una opción novedosa y bienvenida en el segmento más económico del mercado, pero representaba una propuesta de valor algo inestable, especialmente si se tiene en cuenta la escasez de existencias y la inflación de precios, algo a lo que volveremos más adelante en este artículo. Y como señalamos en nuestro análisis de la RTX 3060, su hermana la 3060 Ti (lanzada a finales de 2020) tenía más sentido por no mucho más dinero (y sigue teniéndolo: por cualquier inversión extra, obtienes una buena cantidad de rendimiento adicional).
Del mismo modo, la RTX 3070 Ti no ofrecía una buena relación calidad-precio, de hecho podría decirse que incluso peor que la RTX 3060. En nuestro análisis afirmamos que no ofrecía suficiente potencia adicional respecto a la RTX 3070 estándar y que la RTX 3080 ofrecía mucha más potencia por poco dinero (en términos de precio de venta al público).
Así que, aunque hubo cierta decepción con los nuevos lanzamientos de Ampere para equipos de escritorio, la joya de la corona resultó ser la RTX 3080 Ti. Esta era prácticamente tan apta como la poderosa RTX 3090 en los videojuegos, pero no tan cara (aunque sigue siendo, por supuesto, muy costosa). Fue la gran ganadora de las GPUs de escritorio de Nvidia en 2021, sin duda, aunque dicho esto, si estabas buscando una buena tarjeta gráfica, probablemente habrías elegido cualquiera de los productos de gama alta a un precio (relativamente) decente si podías conseguirlos (de nuevo, como hemos mencionado, volveremos a esos problemas de disponibilidad y existencias).
En 2021, también vimos el lanzamiento de la serie RTX 3000 para laptops gaming con la irrupción de las versiones móviles RTX 3080, RTX 3070 y RTX 3060 (con variantes Max-Q) a principios de año en enero, seguidas de las RTX 3050 Ti y 3050 en mayo.
En general, la primera ronda de tarjetas gráficas móviles se consideró un meritorio paso adelante en cuanto a rendimiento con respecto a las tarjetas gráficas Turing para portátiles de última generación, así que manita arriba. La complicación con estas nuevas propuestas era la variedad de configuraciones de potencia dentro de los mismos modelos de GPU, lo que significaba que la misma tarjeta gráfica ofrecía diferentes niveles de rendimiento en función de la temperatura, la refrigeración, y otros factores de la laptop. De hecho, un equipo portátil bien refrigerado podría ofrecer un mejor rendimiento que uno con una mala refrigeración, aunque este último tenga una GPU RTX 3000 de un nivel superior.
La RTX 3050 siguió en la lista, y fue considerada como una apuesta decente para una GPU de laptop económica. Más que la 3050 Ti, que no ofrecía mucho más en términos de rendimiento general y, lo que es más importante, iba por detrás de la RTX 3060 para móviles (lo que significa que era mejor ir un poco más allá del presupuesto para conseguir la 3060 si era posible).
A nivel general, Nvidia ha realizado un sólido progreso con las GPU móviles para reforzar considerablemente las laptops gaming. Aunque algunos modelos no son tan convincentes.
DLSS (Deep Learning Super Sampling) es la ingeniosa tecnología de Nvidia que utiliza el escalado (y la IA) para reducir la exigencia de la GPU, lo que básicamente aumenta la velocidad de fotogramas sin afectar demasiado a la calidad visual (en términos generales).
El equipo verde avanzó considerablemente con el DLSS en 2021, llevándolo a un montón de juegos más, y a algunos títulos de renombre. Entre ellos se encuentran Battlefield 2042, Call of Duty: Warzone, Rainbow Six Siege, Doom Eternal, Red Dead Redemption 2, Back 4 Blood, Outriders, Marvel's Guardians of the Galaxy, Diablo 2 Resurrected, Horizon Zero Dawn y otros (Baldur's Gate 3 también tuvo DLSS durante el acceso anticipado).
En total, a finales de 2021, Nvidia cuenta con más de 140 juegos (y aplicaciones) que ya son compatibles con DLSS (recuerda que el desarrollador tiene que incorporarlo al juego para que sea compatible). Nvidia también ha tomado medidas para impulsar la adopción de DLSS mediante la implementación de un plug-in para Unreal Engine y el motor Unity, para que los desarrolladores puedan incorporar fácilmente la tecnología cuando trabajen con estos motores de juego.
Además, la compatibilidad de DLSS con Vulkan y luego con los juegos DX11 y DX12 llegó a Proton, que es la capa de compatibilidad de Valve que permite jugar los juegos de Windows en Linux (y será la fuerza motriz del Steam Deck). Esto representa un impulso potencialmente considerable en el rendimiento de los juegos DLSS que podrían sufrir con algunos vientos en contra debido a la ejecución a través de dicha capa de compatibilidad.
Por si fuera poco, vimos cómo DLSS agilizó los primeros juegos de realidad virtual y llegó también a laptops basadas en ARM (con ray tracing incluido). Así que hubo una serie de primicias a lo largo del año, así como un aumento considerable de los juegos compatibles, y el perfeccionamiento continuo de la IA del propio DLSS (que ya está en la versión 2.3).
También cabe destacar que, en septiembre, Nvidia reveló un nuevo giro de la GPU impulsada por la IA en forma de DLAA, que es Deep Learning Anti-Aliasing. Básicamente, hace lo mismo que el DLSS para proporcionar una forma mejorada de antialiasing (suavizar las irregularidades de los gráficos). Hasta ahora, DLAA sólo se ha utilizado en pruebas con el MMO Elder Scrolls Online. Pero podemos esperar escuchar mucho más sobre esta tecnología el año que viene, si se demuestra que es una forma eficaz de suavizar los gráficos y dar un aspecto más realista a los juegos con un mínimo impacto en el rendimiento.
Nvidia lanzó en junio Canvas, una aplicación gratuita (en fase beta) que utiliza una tarjeta gráfica RTX de forma muy inteligente para los creativos. Basta con dibujar y garabatear formas aproximadas en la parte izquierda de la pantalla utilizando diferentes pinceles de materiales (como "piedra" o "río"), y en la parte derecha, la aplicación rellena las imágenes generadas por la IA. El resultado final es la creación rápida de imágenes fotorrealistas, y si no has visto esto en acción, es una de las cosas más geniales que Nvidia ha conseguido durante 2021 al margen de la industria de los videojuegos.
Otro avance interesante para los creativos se produjo a principios de año, en abril, cuando el software GeForce Experience recibió la capacidad de optimizar rápida y convenientemente los ajustes en varias aplicaciones creativas, como Adobe Lightroom e Illustrator. Esto es muy parecido a los ajustes óptimos que Nvidia proporciona para diferentes juegos compatibles.
El año pasado, Nvidia compró ARM por 40 mil millones de dólares en un gran acuerdo (tanto en sentido literal como figurado). Pero en 2021, esta gran adquisición se estancó. Varios reguladores iniciaron investigaciones por motivos de competencia (como la Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido y la Unión Europea), y ha habido una preocupación generalizada por parte de los gigantes tecnológicos rivales (como Microsoft, Google y Qualcomm) de que la compra de Nvidia podría significar una mayor dificultad para utilizar la propiedad intelectual de ARM.
Recientemente, en diciembre, en Estados Unidos, la FTC presentó una demanda para bloquear el gran acuerdo por ser "anticompetitivo", con la directora de la Oficina de Competencia, Holly Vedova, declarando que: "Este acuerdo propuesto distorsionaría los incentivos de ARM en los mercados de chips y permitiría a la empresa combinada perjudicar injustamente a los rivales de Nvidia".
Esta es la última frustración que ha afectado a Nvidia con esta adquisición, y probablemente el mayor obstáculo hasta ahora. Todos los ojos están puestos en cómo se resuelve este caso. El equipo verde ha insistido desde el principio en que "mantendrá el modelo de licencias de ARM y la neutralidad de los clientes", que es "esencial para el éxito de ARM".
El servicio de streaming de Nvidia ha progresado este año, terminando 2021 con un total de más de mil cien juegos disponibles para jugar, y estrenando una nueva suscripción estrella con algunas ventajas considerables.
Para ponerlo en perspectiva, esa biblioteca de más de mil títulos es superior a los 500 juegos que había cuando GeForce Now se puso en marcha oficialmente y salió de la fase beta. Tal vez recuerdes que varios editores importantes también abandonaron la fase posterior a la beta, y hay indicios de que algunos grandes nombres podrían volver al ruedo. Por ejemplo, en octubre vimos que un buen número de juegos de EA se pusieron en circulación para GeForce Now, por lo que es posible que haya más productos (anteriormente, sólo Apex Legends estaba disponible para streaming).
Ha sido un gran año para ampliar la cobertura en términos de soporte de dispositivos, ya que Nvidia introdujo GeForce Now en los televisores inteligentes de LG y en el navegador web Chrome de Google, junto con el soporte para los Macs M1. En diciembre se introdujeron nuevas mejoras en la aplicación para macOS, en particular para que ejecutara los juegos en la relación de aspecto correcta para los MacBook, lo que significa que el servicio puede convertir un MacBook en una laptop gaming.
Sin embargo, la noticia más importante fue el nivel de suscripción insignia que comenzó a implementarse en Estados Unidos en noviembre (y en diciembre en el Reino Unido). La suscripción RTX 3080 ofrece resoluciones de hasta 1440p funcionando a un máximo de 120 fotogramas por segundo (en PC), y recientemente la probamos, encontrando que funcionaba realmente bien, funcionando con fluidez y con un buen nivel de detalle visual (cuando pusimos a tope la configuración de los gráficos, sin perjudicar la jugabilidad).
En general, quedamos muy satisfechos, aunque hay que tener en cuenta que hay que pagar bastante más (el doble) por el nivel RTX 3080 (como era de esperar), y que exige una conexión a internet de 70 Mbps para ejecutar títulos a 1440p a 120 fps.
Por lo tanto, el servicio de juegos en la nube empieza a ser una alternativa real al comprar una computadora gaming cara o incluso para actualizar tu viejo equipo gaming con una nueva tarjeta gráfica, ya que comprar una GPU se ha convertido en una tarea muy complicada. Una lucha absurdamente dura; hablaremos de esto a continuación…
Las tarjetas gráficas escasearon a lo largo de 2021 (continuando con la tónica del año pasado) y, sin importar cuál sea el rango en el que se busque, fue difícil encontrar una GPU. Y si encontrabas una, lo más probable es que el vendedor pidiera bastante más que el precio recomendado, o incluso el doble (o más).
Los bots y los revendedores de tarjetas en eBay fueron sin duda parte del problema, pero la causa principal fue la escasez de componentes, que fue un problema importante el año pasado y que seguirá siendo una pesadilla en el panorama de las GPU el año que viene, por desgracia. Nvidia no pudo fabricar suficientes tarjetas gráficas para abastecer la gran demanda, y su director ejecutivo, Jensen Huang, admitió que estos déficits de producción y problemas de inventario van a continuar hasta 2023 (aunque la directora financiera, Colette Kress, insinuó posteriormente que la situación podría mejorar en la segunda mitad de 2022).
La escasez de existencias, la reventa y los precios inflados han definido el mercado de las tarjetas gráficas en 2021. En 3D Center, una valiosa fuente de precios de GPU actualizados con regularidad y basados en los principales minoristas alemanes, los precios de venta duplican el nivel recomendado.
Sí, a partir del último informe de diciembre de 2021, se paga el doble de MSRP (el doble de lo que se debería) por una tarjeta gráfica Nvidia de la generación actual (bueno, cualquier modelo Ampere excepto la 3070 Ti y la 3080 Ti, tarjetas más nuevas que el informe no incluye, pero que se ven afectadas por problemas similares). Lo mismo ocurre con las GPU de AMD, por cierto, en cuanto a la duplicación de los precios, y, por supuesto, el equipo rojo se enfrenta a los mismos problemas de escasez de existencias e inflación de precios.
Hay que tener en cuenta que a mediados de año hubo un punto en el que los precios de las GPU cayeron, pero eso se debió más bien a una corrección de los precios increíblemente ridículos de mayo, cuando los precios de Nvidia llegaron a triplicar el precio de venta al público (de nuevo, todo esto se basa en 3D Center, y sólo en un conjunto de cifras, pero la esencia general de la enorme inflación de precios es claramente visible en todas las regiones, no sólo en Europa).
No hay dos maneras de decirlo, 2021 fue un año terrible para intentar comprar una tarjeta gráfica de Nvidia (o de AMD), ya que si pudieras encontrar el modelo que querías, tu cartera quedaría afectada por el privilegio. Y eso es lo que ocurre tanto con las tarjetas gráficas de gama alta como con las más baratas; de hecho, hablemos a continuación del mercado económico, que está en peores condiciones en muchos aspectos.
Las tarjetas gráficas de bajo costo siguieron representando un punto muy sensible en 2021, y no solo para Nvidia, pero obviamente es el equipo verde en el que nos enfocamos aquí. Con la actual generación de Ampere, la tarjeta de escritorio de gama más baja era la RTX 3060, y como ya hemos comentado, es una propuesta de valor inestable en comparación con la 3060 Ti, y con un precio recomendado de 6 mil 731 pesos, no es una opción "económica" (y por supuesto, de todos modos no puedes conseguir una tan barata). Todavía recordamos los días en los que con unos pocos miles de pesos podías conseguir una GPU de un nivel parecido al de las flagship.
De todas formas, se lanzaron GPUs RTX 3050 y 3050 Ti para laptops, como ya mencionamos, pero ningún modelo de escritorio, por lo que quien buscaba una tarjeta gráfica Ampere barata estaba a la caza de una tarjeta inexistente, básicamente. Al momento de escribir este artículo, se rumorea que la RTX 3050 de escritorio (tal vez incluso dos versiones de la misma) está en camino en el futuro cercano, en teoría aparecerá en enero de 2022.
Durante este año, los que querían comprar una GPU económica de Nvidia se han visto obligados a hurgar en el fondo del barril de una manera impensable antes de la pandemia. Los compradores han tenido que buscar un modelo como la GTX 1650 Super, una GPU de hace dos años, y pagar una barbaridad por el honor. De hecho, han pagado demasiado (el doble o incluso el triple del precio original de lanzamiento).
Por desgracia, 2021 fue el año en el que, en algunos escenarios, tenía sentido (al menos para los compradores más aventureros) comprar una PC completa sólo para cambiarle la GPU a su equipo y vender la nueva computadora inmediatamente (con su antigua GPU dentro). De esta forma podían recuperar buena parte de la inversión.
Los precios de las GPUs Nvidia, incluso de última generación, se han disparado debido a la gran demanda, lo que ha llevado a algunas personas a buscar tarjetas de segunda mano de generaciones anteriores (como la serie GeForce 10, o incluso los modelos de la serie 900), que representan una mejor relación calidad-precio como solución provisional.
En pocas palabras, ha sido un año terrible para conseguir una tarjeta gráfica barata, o cualquier tarjeta gráfica.
Así que no es de extrañar que hayamos visto a Nvidia probar algunas tácticas decididamente izquierdistas a finales de 2021, concretamente resucitando un viejo modelo Turing: la RTX 2060. Eso sí, con el doble de RAM de video y un mayor número de núcleos (está cargada con la misma cantidad de núcleos CUDA que la antigua RTX 2060 Super, de hecho, aunque tiene una memoria más lenta que esta última).
La idea principal era aliviar la presión sobre la demanda de la RTX 3000 y la frustración por la falta de tarjetas, recurriendo a una GPU de generación anterior que, en teoría, podría producirse en masa junto con las tarjetas Ampere de última generación, ya que se trata de un proceso más antiguo (12 nm).
Sin embargo, esta táctica de despiste no dio resultado. Nvidia lanzó la versión RTX 2060 de 12 GB de forma discreta a principios de diciembre, con tarjetas que acababan de llegar de terceros fabricantes. El problema es que no había stock disponible desde el principio. En el momento de redactar este artículo, todavía no hemos visto que la renovada RTX 2060 llegue a las estanterías. Sin embargo, cuando leas esto, es posible que la GPU haya empezado a salir a la venta, ya que Nvidia ha prometido que estará disponible a partir de finales de diciembre. Así que, en resumen, la GPU relanzada para ayudar a mitigar la escasez de stock sufrió una escasez de stock inmediata.
Para empeorar las cosas, lo que hemos entrevisto de los precios iniciales hace que la RTX 2060 de 12 GB termine siendo muy cara, y de todos modos no vale la pena. Habrá que esperar a ver cómo se establece el precio, pero en un mundo en el que la GTX 1650 Super tiene una fuerte diferencia con respecto a su precio de lanzamiento, como hemos visto, no tenemos muchas esperanzas de que ocurra nada razonable en este caso.
Sobre todo porque hay otra nube oscura aquí, y es el rumor de que los mineros de criptomonedas podrían querer esta GPU, lo que podría afectar aún más a la disponibilidad. Esto se debe a que la 2060 de 12 GB parece ser al menos una perspectiva útil para el minado de Ethereum (la moneda que ha ganado mucha tracción este año), y no tiene la limitación de la tasa de hash impuesta en los modelos RTX 3000 LHR (tasa de hash lite).
LHR fue el intento de Nvidia de restringir artificialmente las tarjetas gráficas Ampere para los mineros este año, en un esfuerzo por asegurarse de que llegaran a manos de los jugadores. Pero ya han aparecido hacks que sortean parcialmente las restricciones de LHR (y hacen que, aunque los mineros pierdan algo de rendimiento, la penalización no sea tanta como pretendía Nvidia).
Por otra parte, en el terreno de las GPUs Nvidia de gama alta, los ajustes de firmware realizados por EVGA en diciembre (y posiblemente por otros fabricantes de tarjetas en el futuro) han aumentado el rendimiento de la minería (aunque esa no era la intención). Cualquier demanda adicional de minería, por supuesto, sólo ha empeorado las cosas para los jugadores que intentan comprar una GPU Nvidia.
Por último, cabe destacar que los esfuerzos de Nvidia por fabricar procesadores de criptominería (CMP) como alternativa a los mineros que compran tarjetas GeForce resultaron bastante ineficaces, y las ventas de estos CMP se desplomaron gravemente a partir de 2021.
Nvidia se mantuvo firme en el mercado de las GPUs este año, continuando con su dominio sobre AMD en tarjetas gráficas dedicadas para escritorio (algo que no sorprende a nadie) y reforzando su gama de tarjetas gráficas Ampere principalmente con el lanzamiento de la excelente 3080 Ti. Por supuesto, la serie RTX 3000 ya era fuerte, así que no importaba realmente que las otras incorporaciones de escritorio (RTX 3070 Ti, 3060) fueran posiblemente mucho menos eficientes.
En el terreno de los dispositivos móviles, hemos sido testigos de una gran cantidad de nuevas propuestas de RTX 3000 que representan un paso adelante muy positivo para las laptops gaming, y Nvidia lo ha respaldado dando considerables pasos adelante con DLSS, extendiéndolo más (a algunos juegos de renombre y a varios motores de juegos populares) y más ampliamente (a los jugadores de Linux a través de Proton, además de los jugadores de VR). También se ha presentado DLAA, que parece un hermano atractivo de DLSS.
El problema fue el deficiente stock de las tarjetas gráficas RTX 3000, que se vio agravado por los revendedores y los mineros, lo que provocó una enorme inflación de los precios. Por supuesto, no podemos culpar a Nvidia por la escasez global de componentes y su rival AMD estaba en la misma situación.
Sin embargo, lo más frustrante fue la ausencia de movimiento en el sector de las GPUs económicas. Los modelos RTX 3050 salieron para laptops, pero a pesar de que las versiones de escritorio se rumoreaban desde principios de año, nunca aparecieron, lo que muy posiblemente esté relacionado con que la capacidad de producción está demasiado apretada, queremos suponer.
Al parecer, la llegada de la RTX 3050 está a la vuelta de la esquina (enero de 2022). Pero realmente podríamos haberla utilizado (y alguna cantidad de la renovada RTX 2060 de 12 GB) a finales de este año, solo para dar a más opciones a los usuarios con menor presupuesto. Aunque de igual forma los precios de este modelo se habrían inflado considerablemente, todo es relativo, y sin duda sería mejor que pagar una GTX 1650 Super.
Si no podías encontrar una nueva GPU que diera un nuevo impulso a tu PC gaming, siempre había otra opción: jugar a Cyberpunk 2077 con ray tracing ( u otros títulos muy exigentes) en tu Chromebook, MacBook o cualquier otro dispositivo (como tu smartphone) con GeForce Now. El servicio de streaming de Nvidia nos ha impresionado mucho, sobre todo el más caro; la RTX 3080, que se ha lanzado este año, y que representa un nuevo nivel de juego en la nube.
No podemos esperar a ver cómo Nvidia impulsa esta opción de streaming (esperemos que traiga a EA y a otros grandes desarrolladores de vuelta al ruedo) el año que viene, junto con lo previsto para el DLSS combinado con el DLAA y, por supuesto, las tarjetas RTX 4000 ('Lovelace') de próxima generación que se espera que se estrenen a finales de 2022.
El otro aspecto fascinante en el ámbito de las GPU a principios del año que viene será la supuesta RTX 3050, y cómo se enfrentará a las rumoreadas tarjetas económicas RDNA 2 de AMD, y lo que es más importante, a los nuevos productos Arc Alchemist de Intel, ya que se cree que el equipo azul está preparando un gran ataque en el sector económico. Son tiempos emocionantes.