El Dodge Charger Daytona SRT está aquí para demostrar que los coches eléctricos no tienen por qué ser prácticos. Parece que en la industria del automóvil existe el pensamiento universal de que todos los futuros conductores de vehículos eléctricos quieren un SUV familiar con características premium. Seguro que muchos de ellos lo hacen, pero también hay auténticos fanáticos de los coches que estarían dispuestos a renunciar a sus V8 por las baterías, siempre que el coche siga siendo igual de alocado.
Los propietarios de Dodge, Stellantis, dicen que este concepto "se conduce como un Dodge, se ve como un Dodge y se siente como un Dodge, y resulta que es un vehículo eléctrico de batería (BEV)". Es posiblemente la mejor frase que hemos oído sobre un VE. Parte de la genialidad de la camioneta eléctrica F-150 Lightning de Ford es que sigue pareciendo una F-150 que la gente ha amado durante años.
El nuevo Dodge Charger Daytona anunciado el jueves, se parece mucho más a los Chargers originales de los años 60 que a los modelos modernos de cuatro puertas, y tal vez un poco más cerca del Challenger SRT Hellcat. Hay algunas líneas más suaves y tiras de luz a lo ancho de la carrocería que le dan un aire más futurista, pero se reconoce enseguida como un Charger. En lugar del V8 HEMI de 6,2 L sobrealimentado, hay un sistema de propulsión eléctrica de 800 V, apropiadamente llamado Banshee.
Solo porque este Dodge Charger Daytona sea eléctrico, no esperes que sea silencioso. Ha sido equipado con un escape de cámara Fratzonic que ofrece 126dB de rugido para igualar a cualquier modelo Hellcat que se precie. Aunque no se han facilitado cifras de rendimiento (al fin y al cabo, aún se trata de un concepto), es probable que sea muy rápido y, al parecer, viene con modos específicos de "slam" y "donut" por si quieres armarte de valor.
Por supuesto, Dodge también se dirige al público de los SUV y también ha anunciado el Hornet PHEV, que es su primer paso hacia la electrificación total de su flota. Pero el concepto del Dodge Charger Daytona nos da la esperanza de que una nueva generación de vehículos eléctricos menos delicados está a la vuelta de la esquina. Todavía hay esperanzas de que un nuevo Chevy Camaro totalmente eléctrico no modifique demasiado su estilo. También tenemos la esperanza de que, a pesar de que el Mustang Mach-e se convierta en un SUV, todavía haya espacio para un Mustang eléctrico clásico en un futuro próximo.
