Dormir bien es muy importante, ya que ayuda al cuerpo y a la mente a descansar, recuperarse y prepararse para el día siguiente. Pero la calidad y la cantidad de sueño necesarias empiezan por quedarse dormido, algo que a algunas personas les resulta fácil y a otras difícil.
Hay noches en las que te acuestas y te duermes en cuestión de segundos, mientras que otras te quedas mirando al techo y buscando desesperadamente los últimos trucos para dormir de TikTok. Sorprendentemente, ninguna de estas dos formas de conciliar el sueño es buena para ti, ya que resulta que dormirse demasiado rápido o demasiado lento puede ser «síntoma de un problema mayor», según los expertos en sueño de The HuffPost.
El tiempo que cada persona tarda en dormirse es completamente único, pero si te duermes en segundos o tardas hasta una hora, esto puede provocar problemas mayores. Entonces, ¿cuánto tiempo deberías tardar realmente en quedarte dormido?
La respuesta rápida a esta pregunta es que debería tardar entre 15 y 20 minutos en dormir. Aunque varía de una persona a otra, esta duración da a la mente y al cuerpo tiempo suficiente para relajarse y prepararse para descansar toda la noche, pero una persona sana debería tardar entre 15 y 20 minutos aproximadamente en conciliar el sueño.
Teniendo en cuenta este tiempo, es importante analizar por qué se duerme demasiado rápido o demasiado despacio. En el primer caso, la respuesta es muy sencilla: te falta sueño. Dormirse demasiado rápido es señal de que no duermes lo suficiente y de que estás cansado.
Hay muchas más razones por las que puedes tardar más de 20 minutos en dormirte. Por ejemplo, puede que tengas una mala rutina nocturna que no te funciona o que hayas tomado cafeína, alcohol u otros estimulantes demasiado tarde. Otras razones pueden ser que te sientas estresado o que sufras insomnio.
Para relajarte correctamente y conciliar el sueño de forma efectiva, debes seguir las reglas de una buena rutina del sueño. Mantener un ritmo constante a la hora de acostarse ayuda a la mente y al cuerpo a reconocer que es hora de dormir y favorece el proceso natural de sentirse cansado y relajado.
Los estimulantes pueden mantenerte despierto durante más tiempo, así que evita los dispositivos electrónicos y la cafeína demasiado cerca de la hora de acostarte. La luz azul emitida por smartphones, laptops y televisores puede indicar al cerebro que es hora de estar despierto, lo que hará que te sientas alerta en lugar de con sueño.
Hacer ejercicio con regularidad tiene un efecto positivo sobre el sueño, ya que estimula la recuperación del organismo y puede ayudar a aliviar el estrés o las emociones negativas que podrían mantenerte despierto durante más tiempo. Una vez en tu cuarto, es importante crear un ambiente cómodo para dormir, con almohadas y cobijas agradables, música ambiental y aromas relajantes.
Por último, y lo más importante, si tardas demasiado en dormir, sal de la cama. Los médicos sugieren que levantarse de la cama y moverse a otra parte de la casa hasta que vuelva a tener sueño puede romper la asociación entre la cama y la sensación de inquietud. Cuando te sientas cansado, vuelve a tu cuarto.