DJI, con la ayuda de varias empresas locales e internacionales, ha logrado un logro impresionante: las primeras pruebas con éxito de un dron de reparto en el Monte Everest (o Monte Qomolangma, como lo llaman los lugareños).
Durante las pruebas de abril, el DJI FlyCart 30, un dron famoso por su capacidad para transportar cargas pesadas en las condiciones ambientales y de altitud más extremas, transportó con éxito tres botellas de oxígeno y 1,5 kg de suministros desde el Campo Base del Everest hasta el Campo 1 (5.300-6.000 m sobre el nivel del mar).
En el viaje de vuelta, los drones transportaron basura de forma eficiente, lo que representa un importante paso adelante en la gestión y el cuidado del medio ambiente en la logística del alpinismo.
La iniciativa busca reducir la peligrosa carga que soportan los guías sherpas locales, que tradicionalmente transportan suministros y recogen basura a través de la peligrosa cascada de hielo del Khumbu muchas veces cada temporada.
Los drones DJI FlyCart 30 tienen como objetivo facilitar esta carga, completando el trayecto entre campamentos en tan solo 12 minutos, en lugar de los 6-8 que tardan los sherpas, independientemente de las condiciones del día o de la noche.
Mingma Gyalje Sherpa, hablando desde su experiencia personal, destacó los riesgos que implican los métodos tradicionales: "El año pasado perdí a tres sherpas. Si no tenemos suerte, si no llegamos a tiempo, perdemos la vida allí". Esta cruda realidad demuestra la necesidad de soluciones innovadoras como el sistema de entrega con drones de DJI.
Aunque se han llevado a cabo tareas de limpieza, el Everest sigue lleno de residuos, lo que ha motivado el despliegue del DJI FlyCart 30 para transportar la basura y los desechos humanos montaña abajo de forma eficiente, reduciendo los viajes de los sherpas a través de la peligrosa cascada de hielo de Khumbu.
Estas pruebas pioneras no sólo representan un avance tecnológico, sino también un compromiso con la protección del medio ambiente en entornos extremos.
