Seamos sinceros, dormir en un vuelo no es lo más fácil. Desde los ruidosos anuncios de la tripulación de cabina hasta tener que despertarse para que la persona que está a tu lado vaya al baño, en un avión hay muchas distracciones e interrupciones que pueden arruinar tu sueño.
Si viajas en un vuelo de larga distancia o te diriges a algún lugar con un gran cambio de huso horario, dormir en un avión es esencial si quieres llegar a tu destino con energía y listo para empezar las vacaciones. Para saber más, hemos hablado con el experto en sueño y director general de MattressNextDay, Martin Seeley, sobre sus consejos para dormir en un avión.
Independientemente de la duración de tu vuelo, estar sentado en el avión durante un periodo prolongado de tiempo es incómodo. Dar un paseo antes de abordar puede ayudar a tu cuerpo a soportarlo mejor y, según Seeley, también puede ayudarte a dormir mejor.
"Los estudios han demostrado que sólo 30 minutos de ejercicio moderado pueden mejorar la calidad del sueño. Otro estudio reveló que las mujeres que pasaban más tiempo activas conciliaban mejor el sueño y pasaban más tiempo dormidas, lo cual es esencial antes de empezar las vacaciones".
Seeley recomienda dar un paseo de 30 minutos por el aeropuerto o la zona libre para dar pasos y conciliar el sueño más rápido y durante más tiempo… además, así tendrás algo que hacer mientras esperas en la salida.
Si piensas dormirte durante el vuelo, procura elegir el mejor asiento en el momento de hacer la reserva. El asiento "correcto" puede tener muchas ventajas, pero Seeley dice que hay un lugar privilegiado para dormir en un avión.
"Elige un asiento en la misma fila que el ala. No sólo es probable que sea la zona más tranquila, sino que, como en el ala suele estar la salida de emergencia, tendrás más espacio para las piernas. Sin embargo, si vuelas en larga distancia, asegúrate de reservar la parte delantera del avión, ya que te servirán la comida primero y descenderás antes, razón por la cual los auxiliares recomiendan esos asientos para las personas que buscan dormir."
Lo último que quieres cuando intentas dormir es que te despierten constantemente, ya sea en un avión o no. Si te vas a dormir una rato, es importante calcular bien el tiempo para que no te despierte la gente comiendo o encendiendo las luces.
"Cuando el avión haya despegado, pregunta a los auxiliares de vuelo cuándo van a servir la comida. De esta forma, puedes programar tu sueño en función de la comida y asegurarte de que no te molesta el servicio."
Dormir varias horas en posición vertical puede provocar dolores y molestias, así que para evitarlo, prepara un kit de sueño y guárdalo en tu mejor equipaje de mano. Seeley sugiere llevar calcetines, un antifaz y tapones para los oídos.
"El aire acondicionado del avión puede ser frío, y llevar calcetines puede evitar que te despiertes si tienes el sueño ligero". Para los que vuelan tarde o durante la noche, un antifaz es esencial para bloquear las luces de la gente leyendo o viendo la tele. Además, recomendamos tapones para los oídos para ahogar el ruido".
Para un mejor apoyo y comodidad, asegúrate de llevar contigo una almohada de viaje.
"Una almohada de viaje te sujetará el cuello mientras duermes derecho. Las mejores son las de suave espuma viscoelástica, ya que se amoldan a la forma del cuello. Sin embargo, si no tienes una o tienes poco espacio en el equipaje de mano, envolver una manta o bufanda alrededor de tu cuello puede ayudar con el apoyo para dormir."
Para los que no conozcan el ruido blanco, combina todas las frecuencias del espectro acústico a la misma intensidad para crear un sonido que bloquea otros ruidos y así evitar que interrumpa tu sueño. Como los aviones son muy ruidosos, utilizar una aplicación de ruido blanco es una excelente forma de enmascarar los sonidos que te rodean y ayudarte a conciliar el sueño sin demasiadas interrupciones. Hay muchas apps en las que puedes encontrar listas de reproducción dedicadas al ruido blanco, como Spotify, Calm y Headspace, y también puedes convertir tu iPhone en una máquina de ruido blanco.
Uno de los consejos clave para una buena higiene del sueño es evitar el alcohol antes de acostarse, y lo mismo se puede decir cuando se trata de volar.
"Aunque puede facilitar que te quedes dormido, el alcohol interrumpe el sueño y disminuye su calidad, haciendo que te sientas más cansado. Y, si alguna vez te ha irritado la garganta en un avión, es porque el aire es notoriamente seco. Beber agua antes y durante el vuelo aliviará estos problemas y te facilitará conciliar el sueño."
Para evitar el jet lag, Seeley recomienda:
"Cambiar el reloj nada más subir al avión para poder dormir y actuar según esa zona horaria. Si vas a hacer un vuelo de larga distancia, también te recomendamos que te adaptes a la nueva zona horaria dos o tres días antes de volar para regular tu nueva rutina de sueño". Ambos consejos ayudarán a tu reloj corporal interno a ajustarse, haciéndote menos susceptible al jet-lag".