La Navidad ya ha pasado. El reloj marcó la medianoche del 31 de diciembre y 2024 ya está aquí. Ahora, si eres como la mayoría de la población, tendrás nuevos objetivos en mente. Hasta el 12 de enero, el Día Nacional de Renunciar. Este día, que suele caer el segundo viernes de enero, ha sido bautizado como el día del desastre para los propósitos, en el que la gente abandona sus planes para el año nuevo y vuelve a sus viejos hábitos y rutinas, pero no tiene por qué ser así.
Aquí tienes 10 consejos que te ayudarán a superar el "Día de la Renuncia" y a mantenerte en el buen camino durante el resto de 2024. ¡Tú puedes hacerlo!
Esto da un propósito a cada sesión de entrenamiento. Independientemente de si se trata de un motivo personal relacionado con tu salud o la pérdida de peso, o de un objetivo de rendimiento como mejorar tu nivel de ciclismo o entrenar para un maratón, si tienes un objetivo en mente, cada vez que realices una sesión de entrenamiento tendrás un motivo para participar.
Establecer un plan de entrenamiento te ayudará a crear objetivos realistas en función de tu nivel de forma física y a volver a ilusionarte con el entrenamiento.
¿Quizá un nuevo tipo de bicicleta o unos goggles de natación puedan ayudarte a encontrar algo de motivación? De hecho, el invierno es un buen momento para probar nuevas actividades, aunque nunca las hayas practicado antes.
Si eres corredor, por ejemplo, probar algún tipo de entrenamiento combinado, como un nuevo circuito o una clase de yoga, no sólo te ayudará con tu entrenamiento, sino que también podría ser positivo para tu técnica en general, a la vez que te ayudará a prevenir lesiones y a mejorar tu resistencia. El entrenamiento combinado, como HYROX, es una excelente forma de inyectar una dosis de variedad y diversión a tu entrenamiento, ya que pruebas cosas nuevas y desafías a los músculos a moverse de formas diferentes.
Un equipo nuevo y adecuado a las condiciones meteorológicas puede darte un gran impulso psicológico durante los meses más duros y fríos, y sentirte bien (y abrigado) con lo que llevas puesto puede ayudarte a mantener la motivación.
Si vas a entrenar al aire libre, prueba a ponerte una buena capa base, una camisa de manga corta y una capa intermedia, además de unos guantes, un gorro e incluso una cazadora impermeable o un chaleco. Si te sientes bien con tu ropa deportiva, es más probable que te animes a sudar.
Al igual que con el equipo, también es una buena idea preparar la ropa de deporte la noche anterior al entrenamiento. Tenerlo todo preparado te evitará tener que buscar la ropa o la bolsa del gimnasio, por lo que la única tarea que tendrás que hacer será ponerte los tenis y salir por la puerta. Sin excusas.
Unirse a un grupo de amigos o participar en clases de ejercicio en grupo en las que estarás rodeado de otras personas con ideas similares que tienen deseos y objetivos parecidos a los tuyos es una excelente forma de entrenar y socializar.
Psicológicamente, entrenar con otras personas y verlas alcanzar sus objetivos puede mantenerte con ambición al intentar seguir su nivel de determinación. Investigadores de la Universidad Estatal de Kansas descubrieron que entrenar con alguien que percibes como más apto físicamente que tú puede ayudarte a aumentar el tiempo y la intensidad de tu entrenamiento en un 200%.
Si el tiempo te está desanimando, no hace falta que salgas a correr o a hacer ciclismo. También puedes prepararte para el invierno y comprar una bicicleta estática o unas pesas rusas. Entrenar en casa puede ser una forma más eficaz de hacer ejercicio y, además, ahorrar dinero. La comodidad es clave cuando hace frío y tu motivación es nula.
El tiempo lo es todo cuando se trata de la motivación para hacer ejercicio. Si estas demasiado cansado para hacer ejercicio por la mañana, ¿por qué no programarlo durante la hora de la comida o nada más llegar a casa del trabajo? O si sabes que tienes un día de trabajo ocupado todos los jueves, ¿por qué no haces una clase de yoga ese día para desestresarte? En cualquier caso, programar tu ejercicio semanal eliminará todas las excusas para no mantenerte en forma: todo lo que tienes que hacer es presentarte, sudar y sentirte genial.
La música puede ser un gran motivador y compensar la falta de estímulos visuales, especialmente cuando entrenas en interiores o en casa.
Encuentra un estilo de música que te ayude a mantener el ritmo para que tus sesiones de entrenamiento sean más divertidas (se ha demostrado que las canciones que tienen entre 125 y 140 pulsaciones por minuto son las mejores) y déjate llevar por la música. Los audiolibros y podcasts también son una excelente forma de mantenerte motivado, sobre todo cuando el presentador te inspira. Prueba Escape Your Limits o Huberman Lab, donde encontrarás muchas ideas motivadoras que pueden ayudarte a modificar tus objetivos de salud, hábitos, alimentación y forma física. Atomic Habits de James Clear es un gran audiolibro también.
Encuentra la motivación uniéndote a un mundo virtual de fitness: hay muchas entre las que elegir y cada vez son mejores.
Las aplicaciones de entrenamiento como Nike Training Club, Gymshark 66 o la aplicación Peloton pueden convertir tus sesiones en interiores en un entrenamiento divertido y atractivo sin salir de casa. No sólo puedes entrenar con personas y entrenadores reales y participar en retos de la comunidad, sino que puedes hacer otros entrenamientos en cualquier área que te guste; piensa en entrenamiento de fuerza, respiración, yoga, pliometría o incluso movilidad.
Está muy bien tener objetivos y motivarse para entrenar, pero también hay que disfrutar de las recompensas, ya que te darán más ganas de conseguirlos. Así que acuérdate de tener días de descanso y disfrútalos, así como de regalarte un nuevo kit o un nuevo sabor para tu licuado de proteínas favorito.
Las sales de baño de Epsom para después de entrenar son muy relajantes y excelentes para la recuperación, y una versión más sana de tu comida para llevar favorita es una buena manera de animarte y llegar a casa aún más rápido. Las PB son fáciles de trabajar cuando hay una buena comida esperando en la mesa.
