Aunque el mundo de las cámaras sin espejo de gama alta puede parecer anticuado para algunos, en realidad son piezas increíblemente importantes del kit. Lejos de limitarse a mejorar la calidad de la fotografía y el video, también sirven para impulsar los límites de la tecnología de sensores, que con el tiempo se extenderá a otros dispositivos.
Sony acaba de presentar su nueva cámara, diseñada para ocupar ese segmento del mercado. Llamada Sony A1 II, esta cámara es la continuación de la Sony A1 original, presentada hace casi cuatro años.
Desde el primer momento, se puede decir que se trata de un equipo impresionante: el sensor CMOS Exmor RS de fotograma completo ofrece una resolución de 50,1 megapíxeles. Además, está equipada con el motor de procesamiento BIONZ XR, que ofrece una visualización sin oscurecimiento y un enfoque automático completo, así como seguimiento de la exposición automática a una velocidad de hasta 30 fps.
Un sistema óptico de estabilización de imagen de cinco ejes permite a los usuarios conseguir hasta 8,5 pasos en el centro y 7 pasos en el borde periférico. Se trata de un grado impresionante de estabilización, lo que significa que probablemente se podría conseguir un metraje de muy alta calidad desde la parte trasera de una cuatrimoto con una rueda ponchada.
Los videógrafos tampoco se quedan atrás: se puede grabar hasta 8k a 30 o 4k a 120, lo que es más que suficiente para las necesidades de la mayoría de los usuarios.
Pero donde las cosas se ponen realmente interesantes es en el enfoque automático de la Sony A1 II. Para ello se utiliza una unidad de procesamiento de IA dedicada, que ayuda a reconocer a las personas con mayor precisión basándose en una simulación de la postura. Esencialmente, el sistema de la cámara crea una especie de esqueleto digital, que se utiliza para informar al enfoque automático y lograr imágenes más nítidas.
A nosotros nos parece una excelente idea. En teoría, la IA debería ser capaz de hacer esos microajustes mucho más rápido que tu cerebro y tus manos, dejándote con un conjunto de imágenes más nítidas. Por supuesto, tendremos que esperar a probarla para juzgar por nosotros mismos.
¿Cuánto cuesta una cámara como ésta? Pues prepárate, porque la Sony A1 II no iba a ser barata. A 6.299 libras (unos $161,545.00 mxn aproximadamente), se trata de un kit muy caro. Ese precio es sólo para el cuerpo, así que tendrás que tener en cuenta el costo de un objetivo. Aun así, si quieres lo mejor de lo mejor, éste es un buen punto de partida.