Samsung ha hecho un cambio en su calendario de actualizaciones para algunos smartphones flagship sorprendentemente más recientes.
En algunos aspectos, no se trata de un cambio importante: es la forma en que Samsung estructura su soporte de seguridad para los smartphones que fabrica. Durante unos años, recibes actualizaciones mensuales que garantizan que tu dispositivo está siempre al día. Luego, en un momento determinado, esas actualizaciones mensuales pasan a ser trimestrales y, finalmente, van disminuyendo conforme se reduce el soporte con el paso del tiempo.
Pues bien, el cambio de las actualizaciones mensuales a las trimestrales acaba de llegar para cualquiera que tenga un smartphone Samsung Galaxy S20, ya sea un S20 Ultra, un S20 Plus o un S20 estándar (o incluso el más económico S20 FE).
La actualización de marzo de 2024 se lanzó como siempre, pero va a ser la última actualización mensual, ya que la próxima ahora se espera para junio, según Android Authority.
Teniendo en cuenta que la gama Galaxy S20 llegó en 2020, esto puede o no ser una sorpresa, dependiendo de la atención que se haya prestado a las promesas de Samsung en materia de software.
Por un lado, la gama ya dejó de recibir actualizaciones de Android tras cumplir los tres años de soporte prometidos inicialmente. Así que, en ese sentido, no es una gran sorpresa ver que las actualizaciones de seguridad siguen el mismo camino. Sin embargo, no deja de ser decepcionante que un hardware que sigue siendo excelente se quede atrás.
También es un recordatorio del progreso que se está haciendo poco a poco en este frente. Mientras que a la generación Galaxy S20 se le garantizaban tres años de actualizaciones importantes de Android, Samsung ha ampliado desde entonces esa promesa a siete años para su serie S24, incluido el Samsung Galaxy S24 Ultra.
Esto coincide con algunos competidores y es claramente una señal de hacia dónde se dirige el mercado.
Google también garantizó siete años de actualizaciones para la serie Pixel 8 (fue el primero en comprometerse a cumplir ese objetivo). Es bastante más que la duración menos definida del soporte de Apple para los modelos de iPhone (que parece acabar siendo normalmente de unos cinco años). Pero, no nos sorprendería que Apple siguiera esta tendencia en el futuro.
Así que, con suerte, con el tiempo nuestros smartphones empezarán a durar aún más en lo que a software se refiere.