Dar prioridad al cuidado del cabello debería ser siempre una parte importante de cualquier rutina de cuidado personal, especialmente en épocas frías. Si no sabes por dónde empezar, los aceites capilares pueden ser muy beneficiosos, sobre todo para quienes desean hacer crecer su cabello, añadir grosor o reparar cualquier daño causado por tratamientos químicos o tintes. Sin embargo, aplicar los aceites equivocados puede engrasar el cabello o irritar el cuero cabelludo, por lo que es importante saber lo que se está haciendo.
Para llegar al fondo de la cuestión, hablamos con el Dr. Faisal Ahmed Hammadi, tricólogo residente de PowerYourCurls. El Dr. Hammadi nos habló de los principales aceites capilares que se utilizan en las rutinas de cuidado del cabello y nos dio consejos sobre su eficacia. También compartió el tipo de aceites que pueden dañar el cuero cabelludo, y es este consejo el que queríamos compartir contigo.
El aceite de ricino se obtiene del aceite prensado de las semillas de ricino. Sus beneficios van desde el crecimiento del cabello y propiedades antiinflamatorias hasta la reducción de la caspa.
"El aceite de ricino puede multiplicar por cinco el crecimiento natural del cabello e hidratar el cuero cabelludo seco. Sus beneficios para el crecimiento del cabello también pueden ayudar a impulsar el crecimiento de cejas y pestañas"
Afirma el Dr. Hammadi.
Según el Dr. Hammadi, la primera forma de utilizar el aceite de ricino es evitar las manchas llevando una camisa que no te importe manchar. Después, hay que seccionarse el cabello y usar guantes para aplicar el aceite en el cuero cabelludo. Puedes utilizar las manos, pero también un cepillo aplicador. Masajea con el aceite durante unos minutos y a continuación, aplícate aceite de ricino. El Dr. Hammadi también aconseja evitar la aplicación excesiva.
"No es necesario empapar el pelo con aceite. Para comprobar si la aplicación es uniforme, el pelo debe estar húmedo. Si lo mojas con aceite, se obstruirán los folículos pilosos, lo que puede aumentar el riesgo de caspa y caída del cabello. Incluso puede resultar difícil aclarar el aceite".
Afirma el Dr. Hammadi.
El aceite de romero hace maravillas en el cabello y el cuero cabelludo. Se ha descubierto que tiene propiedades que pueden favorecer el crecimiento y el grosor del cabello, lo que se consigue mejorando el flujo sanguíneo y disminuyendo la inflamación.
"Quienes tengan parches de calvicie en la coronilla pueden aplicarse aceite de romero como forma eficaz de promover el crecimiento de los folículos pilosos y fortalecer los existentes. También puede proteger del empeoramiento de la caída del cabello, ya que sus propiedades pueden ayudar a estimular el cuero cabelludo y mejorar el flujo sanguíneo a los folículos pilosos"
Afirma el Dr. Hammadi.
El Dr. Hammadi aconseja combinar el aceite de romero con unas gotas de aceite de coco o jojoba como portador. Una vez combinado, masajéalo en el cuero cabelludo.
"Es necesario mezclarlo con un aceite portador porque demasiado romero tiene una gran potencia y es probable que irrite la piel"
Señaló el Dr. Hammadi.
La cantidad de gotas puede variar en función del grosor del pelo, pero hay que asegurarse de que el aceite cubra uniformemente el cabello. Después, déjalo actuar al menos media hora antes de aclarar el pelo.
"Utiliza la mezcla de aceite de romero en el cuero cabelludo una o dos veces por semana. Los resultados pueden variar, pero puede haber mejoras en el crecimiento y grosor del cabello después de usarlo durante varias semanas o meses"
Comentó el Dr. Hammadi.
El aceite de coco es ideal para revitalizar el cabello dañado porque suaviza, hidrata y fortalece el cabello frágil y quebradizo. Además, refuerza las cutículas capilares y lo protege del impacto medioambiental.
"El aceite de coco también ayuda a suavizar y acondicionar el cabello. Ayuda a reducir la pérdida de proteínas en todo tipo de cabellos. También es rico en ácido láurico y puede penetrar en el tallo capilar y actuar como acondicionador diario"
Explicó el Dr. Hammadi.
El Dr. Hammadi explicó que el aceite de coco puede aplicarse de cuatro formas distintas. En primer lugar, puede aplicarse antes del champú. De este modo, el pelo absorbe el exceso de agua, lo que puede evitar daños y sequedad. Puedes dejarlo actuar entre 15 y 30 minutos antes de lavarte el pelo. Aplícalo más en la parte media y en las puntas de los mechones.
La segunda forma es utilizarlo como acondicionador, lo que ayuda al aceite de coco a fortalecerlo como alternativa a los acondicionadores estándar. Puedes añadir unas gotas del aceite en el acondicionador para mejorar su efecto suavizante.
La tercera forma es añadirlo mientras te peinas para domar el frizz. Aplícalo cuando el pelo aún esté húmedo para que absorba fácilmente sus nutrientes y también puede ayudar a peinarlo.
La cuarta y última medida consiste en masajear el cabello con una o dos cucharaditas de aceite. Después, lava el pelo al cabo de unas horas o aplícalo durante la noche si tu cabello está muy dañado.
El Dr. Hammadi también aconseja utilizar el aceite por la noche y lavarlo con champú dos veces para reducir el frizz.
A pesar de los beneficios que el cabello obtiene, algunos aceites capilares, si se aplican en exceso, pueden dañar el cuero cabelludo. Según el Dr. Hammadi, el aceite de argán actúa como por arte de magia, pero advierte de los riesgos que puede entrañar para quienes tienen el cabello graso, sobre todo porque puede aumentar el riesgo de caspa.
El Dr. Hammadi también destacó el uso del aceite de oliva para masajear el cuero cabelludo. Puede ser beneficioso para el tallo capilar, pero puede dar a la cabellera un aspecto apagado y grasiento. Además, tiende a obstruir los poros, por lo que puede acumular suciedad e irritar.
El tercer aceite que hay que evitar es el de limón, sobre todo porque favorece la caída del cabello en lugar de prevenirla. También hará que el pelo parezca más apagado.
