Hace un año, Mazda nos sorpredio a todos con un impresionante prototipo de deportivo llamado Iconic SP, y ahora dice que se convertirá en un auto de producción dentro de poco tiempo.
Así lo afirman Masashi Nakayama, director general del estudio de diseño de la marca japonesa, y Naohito Saga, director ejecutivo de planificación estratégica de I+D de Mazda. Nakayam ha declarado: "Este concept car no es uno de esos autos de exposición vacíos. Se ha diseñado con la intención real de convertirlo en un modelo de producción en un futuro no muy lejano".
Presentado en el Salón del Automóvil de Tokio de 2023, el Iconic SP es un adelanto de lo que podría ser un futuro modelo deportivo de Mazda. Aunque compacto como un MX-5, también podría convertirse en un sucesor del deportivo RX-7 de los años 90. Presenta una carrocería con mucho volumen, un interior de dos plazas y unas puertas que se abren verticalmente, dignas de Instagram.
Pero más interesante que el diseño era la propuesta de motorización. En lugar de un motor atmosférico, como el MX-5 actual, o una configuración totalmente eléctrica de motor y batería, Mazda sugirió que el Iconic SP estaría propulsado por una cadena cinemática híbrida que utilizaba un motor rotativo para generar potencia, que luego se transmitía a los motores eléctricos. La potencia total declarada era de 370 CV, aproximadamente el doble que la del último MX-5.
Al hablar de la posibilidad de una versión de producción, Saga añadió: "Al ver el auto, uno se imagina qué tipo de motor lleva en el interior. Cuanto más tiempo pases mirándolo, más te revelará el coche".
Explicando la seriedad con la que Mazda quiere hacer realidad el vehículo, Saga añadió: "En el proceso de desarrollo, se investigó meticulosamente todo, desde la posición de las puertas y los neumáticos hasta la longitud del vehículo, la posición de los asientos de los ocupantes y la visibilidad, antes de llegar a las especificaciones finales".
«Realmente muestra cómo queríamos hacer de él un coche que manifestara el compromiso de Mazda con el futuro, especialmente en términos de sostenibilidad y del futuro papel de nuestra tecnología de motor rotativo".
Mazda utiliza un motor rotativo como extensor de autonomía para su MX-30 R-EV, y anteriormente empleó un motor de este tipo en el deportivo RX-8. También conocido como motor Wankel, en honor a su creador, Felix Wankel, el motor rotativo utiliza un rotor triangular dentro de un cárter ovalado, en lugar de los pistones clásicos.
El concept car Iconic SP iba a utilizar un sistema EV de dos rotativos, que Mazda describe como "altamente escalable, que funciona con combustibles y genera electricidad a partir de fuentes neutras en carbono". La empresa añadió: "Su tamaño compacto, además, permite al Mazda Iconic SP integrarse en un paquete de perfil bajo similar al de un deportivo de media cilindrada, lo que promete una experiencia de conducción estimulante."
Saga explicó que el coche podría funcionar con diversos combustibles, como petróleo sostenible (en el que la gasolina se crea con carbono extraído de la atmósfera, en lugar de con combustibles fósiles) e incluso hidrógeno, que puede quemarse de forma similar a la gasolina. Saga afirmó que, independientemente del combustible neutro en carbono que se generalice, el motor rotativo puede adaptarse para funcionar.
Esto significa que, según Mazda, la cadena cinemática del Iconic SP "tiene potencial para reducir las emisiones hasta en un 90%", desde la perspectiva de las emisiones a lo largo de la vida útil de un vehículo, en comparación con los actuales vehículos de gasolina.