Ahora que se acerca la temporada de playa, muchos se preguntan si pueden recuperar el tiempo perdido haciendo ejercicio todos los días hasta las vacaciones de verano. La respuesta es más complicada que un sí o un no y depende de varios factores, como el nivel de forma física, la intensidad de los entrenamientos y el estado general de salud.
La respuesta corta es no, no puedes, sobre todo si hace tiempo que no haces ejercicio constante. El ejercicio exige mucho al cuerpo, y si el sueño y la recuperación no son los correctos, no conseguirás estar más delgado y fuerte, sino que te lesionarás.
La mayoría de los expertos en fitness recomiendan incorporar días de descanso a una rutina de entrenamiento para dar tiempo a los músculos a recuperarse y repararse. Según el American Council on Exercise (ACE), los principiantes deberían descansar al menos un día entre entrenamientos para evitar el desgaste.
Cuando adquieras experiencia y mejores tu forma física, puedes aumentar progresivamente la frecuencia y la intensidad de tus entrenamientos, pero sigue siendo importante incluir días de descanso regulares.
No te estamos recomendando que no hagas ejercicio, sólo una aclaración. El entrenamiento de resistencia (cualquier ejercicio que te ponga en movimiento contra una resistencia, ya sean mancuernas, bandas de resistencia o tu peso corporal) ofrece muchos beneficios no estéticos que contribuyen a la salud y el bienestar general.
Uno de ellos es la mejora de la fuerza y la masa muscular, que puede mejorar el rendimiento físico en las actividades cotidianas y reducir el riesgo de lesiones.
Se ha demostrado que el entrenamiento de resistencia aumenta la densidad ósea, reduciendo el riesgo de osteoporosis y fracturas, sobre todo en los adultos mayores. También puede ayudar a mejorar la salud y la movilidad de las articulaciones, aumentando la flexibilidad y reduciendo el riesgo de rigidez relacionada con la edad.
El entrenamiento de resistencia también tiene efectos positivos sobre la salud metabólica, como el aumento del metabolismo, la mejora de la sensibilidad a la insulina y un mejor control del azúcar en sangre, lo que puede ayudar a controlar el peso y reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes de tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares. La lista es interminable.
La mejor forma de enfocar los entrenamientos constantes es asegurarte de que no trabajas los mismos músculos con los mismos ejercicios todos los días. El fitness tiene muchas caras, y si de verdad quieres estar en forma, tendrás que hacer algo más que aumentar la masa muscular.
En este sentido, hemos elaborado una rutina de entrenamiento semanal muy sencilla para que te hagas una idea de lo que queremos decir.
Recuerda escuchar a tu cuerpo y ajustar tu rutina de entrenamiento según sea necesario. Si te sientes cansado o sientes un dolor excesivo, es importante que te tomes un descanso y permitas que tu cuerpo se recupere. Asegúrate de incorporar a tu rutina una nutrición, hidratación y sueño correctos para mantener tus objetivos de forma física.