La industria cinematográfica no es ajena a las nuevas versiones: al igual que en el mundo de los videojuegos, cada vez es más común que los ejecutivos busquen entre sus franquicias existentes para ver cuáles podrían ser candidatas a una nueva versión. Y no siempre se trata de las películas que uno espera, como demuestra un nuevo estreno que llegará muy pronto a Disney+.
"La mano que mece la cuna" llegará al servicio de streaming el 22 de octubre y es una nueva versión de un clásico de culto de 1992 del que quizá hayas oído hablar, pero nos sorprendería que lo hubieras visto. La nueva película está protagonizada por Mary Elizabeth Winstead y Maika Monroe, y por el tráiler queda bastante claro que la trama nos llebará por caminos oscuros a medida que se desarrolle.
Winstead interpreta a Caitlin, una madre que busca contratar a una niñera para que la ayude con el reto de criar a su primer hijo, y se encuentra con Polly (Monroe), que parece ser la candidata perfecta, sobre todo por las impecables recomendaciones de sus anteriores clientes. Caitlin contrata a Molly y, tras un comienzo tranquilo, parece claro que las grietas empezarán a aparecer bastante rápido.
El tráiler deja claro que algo no va bien con Molly, sobre todo por su capacidad para ignorar a un bebé que llora y al que se supone que debe cuidar, pero también queda claro que la propia Caitlin podría tener algunos secretos. Se trata de una historia sobre la manipulación y mentiras, y la capacidad de Molly para ganarse al niño a su cargo es clave.
También parece que habrá al menos dos periodos de tiempo distintos, con algunas escenas que muestran a un niño pequeño y otras que muestran a uno mucho mayor, aunque podríamos estar interpretándolo mal y en realidad se trate de dos niños, algo que debería ser más fácil de aclarar en los próximos avances o cuando la película llegue a Disney+.
Volviendo al punto, "La mano que mece la cuna" es una elección interesante para un remake, con una puntuación en Rotten Tomatoes de alrededor de 60% tanto por parte de la crítica como del público, lo que sugiere que no es odiada, pero tampoco es precisamente muy querida. El tiempo dirá si es una buena elección por parte de los grandes cerebros de Disney o una un poco inútil.