Sabemos que Apple está impulsando la IA como la gran novedad de iOS 18 este año, y ahora se han revelado más detalles de lo que eso significa en realidad. La versión corta es que Siri probablemente te ayudará a ser más productivo, pero se rumora que la empresa no está tratando de crear un rival para ChatGPT.
Los detalles llegan a través de Mark Gurman, de Bloomberg, que afirma que la empresa ha llamado a estas mejoras "inteligencia proactiva". Además de hacer que las interacciones con Siri sean más interactivas, Apple se ha centrado en mejorar las tareas cotidianas. Así, Siri podrá ofrecerte una sinopsis de artículos de noticias o una transcripción de notas de voz, controlará mejor tu calendario y podrá sugerirte aplicaciones útiles.
Según Gurman, habrá funciones de IA generativa, como "algunas mejoras para las fotos", pero no parece que vayan a impresionar a nadie que haya estado utilizando las funciones de IA en aplicaciones como las de Adobe.
Como se ha informado anteriormente, Apple se encargará de la mayor parte del trabajo pesado de la IA en el iPhone, pero también utilizará sus propios servidores en la nube para ofrecer las funciones más avanzadas y actualmente está instalando chips Apple de alta gama para adelantarse a ello. Sin embargo, Gurman afirma que no veremos un chatbot al estilo de ChatGPT.
Según Gurman, aunque la empresa es consciente de que tiene que alcanzar a otras empresas en el campo de los chatbots, algunos ejecutivos de Apple son "alérgicos" a la idea de que la empresa siga por ese camino: en su opinión, las reacciones inesperadas y los resultados sin sentido de los chatbots de otras empresas han dañado la reputación de los chatbots, y no quieren manchar la reputación de la empresa con chatbots que no ofrezcan resultados.
La solución de la empresa, al menos a corto plazo, es adquirir la tecnología de otros fabricantes. Gurman afirma que se asociará con openAI para llevar su tecnología al iPhone junto con las propias mejoras de Siri basadas en IA de la compañía, y Apple cree que esa combinación será lo suficientemente buena para los consumidores.
A largo plazo, sin embargo, Apple sabe que tendrá que desarrollar sus propios sistemas: la estrategia de la compañía siempre ha sido controlar las tecnologías de las que dependen sus productos, y no se puede controlar lo que no se tiene.