Tener el mejor jacuzzi en el jardín es una forma excelente de relajarse después de un largo día. Se ha demostrado que sumergirse en el agua con regularidad es sorprendentemente beneficioso, ya que mejora el sueño, acelera la recuperación de lesiones, calma los músculos y alivia el dolor. Pero si tu jacuzzi está un poco sucio, no quieres que ni tú ni tus amigos y familiares se sumerjan en sus turbias aguas. Limpiar un jacuzzi puede parecer una tarea complicada, pero es más fácil y rápido de lo que imaginas.
Aquí tienes nuestra guía paso a paso para limpiar un jacuzzi, incluidos los productos que debes utilizar y la frecuencia con la que debes vaciarlo.
Para mantener el jacuzzi en perfectas condiciones, debes limpiarlo y desinfectarlo con frecuencia para que siga siendo seguro y agradable de usar. A continuación te indicamos cómo limpiarlo correctamente. Recuerda consultar las instrucciones del fabricante antes de empezar a limpiar.
En primer lugar, purga los conductos de tu jacuzzi. De este modo se elimina la suciedad, las bacterias, las incrustaciones o las acumulaciones de las tuberías que pueden acumularse en el sistema de tuberías. De lo contrario, estos contaminantes pueden afectar a la potencia y la calidad del agua. Para limpiar las tuberías, utiliza un producto especial de limpieza de tuberías (consulta las recomendaciones del fabricante) y sigue sus instrucciones en cuanto a cantidad y duración de la limpieza.
Una vez limpias las tuberías, apaga el jacuzzi y vacía el agua. De nuevo, sigue las instrucciones del fabricante, pero la mayoría tienen una válvula de vaciado en la parte inferior o en el interior del compartimento. Como alternativa, puedes utilizar la mejor manguera de jardín o una bomba subversiva para vaciarlo.
Una vez vacío el jacuzzi, limpia cualquier suciedad o sedimento que haya quedado en la bañera tras el vaciado antes de fregar los chorros, los asientos y el interior del jacuzzi con un limpiador especializado y un trapo suave. A continuación, acláralo y límpialo con una toalla.
A continuación, limpia el filtro. Si utilizas el jacuzzi con regularidad, deberías limpiarlo una vez a la semana. Después de extraer el filtro, enjuágalo para eliminar cualquier resto de suciedad. Sumerge completamente el filtro en la solución y déjalo de 12 a 24 horas para eliminar todos los contaminantes. Lávalo por última vez, sécalo por completo y vuelve a instalar el filtro.
Ahora que el interior del jacuzzi está limpio, es hora de limpiar el exterior. Con un trapo suave y detergente neutro, limpia los paneles exteriores para eliminar la suciedad. Limpia cualquier resto de suciedad y deja secar.
La cubierta de tu jacuzzi puede acumular mucha suciedad y mugre, por lo que es importante limpiarla con regularidad, especialmente si ves que se acumulan restos en ella. Utiliza una manguera para pulverizar la suciedad antes de limpiarla con un trapo. Algunas marcas ofrecen un limpiador de cubiertas, así que si lo tienes, rocíalo sob
Una vez limpio, rellénalo siguiendo las instrucciones del fabricante. Normalmente, esto implica colocar la manguera en la unidad de filtro y abrir la llave. Una vez llena, comprueba el pH del agua y añade un desinfectante. Por último, cubre el jacuzzi con la cubierta limpia o métete dentro.
El equilibrio químico del jacuzzi cambia con frecuencia, principalmente debido al ambiente cálido, al movimiento del agua y las burbujas, y a los aceites corporales que entran en el agua. Por este motivo, es necesario analizar el agua con regularidad y, si observas algún cambio, debes aplicar un tratamiento de choque.
El tratamiento de choque consiste en añadir al agua una dosis de productos químicos superior a la normal. También conocido como oxidación, este choque reduce las bacterias y hace que el agua sea segura. A continuación le explicamos la mejor forma de purgar el agua de su jacuzzi.
Para comprobar el equilibrio del PH, toma una tira reactiva o un lector digital e introdúcelo en el agua. Asegúrate de colocar la tira en el mismo lugar y a la misma profundidad cada vez que hagas la prueba, así obtendrás las lecturas más precisas. El equilibrio de pH correcto para tu jacuzzi debe estar entre 7,0 y 7,4 con un desinfectante de bromo o entre 7,2 y 7,6 con un desinfectante de cloro.
Para iniciar el tratamiento de choque, activa los chorros del jacuzzi para ventilar el agua. Esto permite que el tratamiento penetre en todos los rincones y grietas en lugar de quedarse en un solo lugar. A continuación, añade los productos químicos con o sin cloro. Sigue las instrucciones de los productos químicos en cuanto a la cantidad que necesitas y vierte el tratamiento cerca de las entradas de agua para que circule. Deja que el agua lo disperse durante 20 minutos.
Se recomienda limpiar a fondo el jacuzzi 3-4 veces al año. Si lo utilizas regularmente, debes comprobar el equilibrio del pH del agua para mantenerlo limpio y el filtro debe limpiarse una vez al mes.