En T3, somos grandes fans del Nintendo Switch y en mi casa también: la única razón por la que no juego tanto con mi consola es porque mis hijos nunca me dejan usarla. Pero, sin importar que tengas la Nintendo Switch estándar, la versión OLED o Lite, el talón de Aquiles de este dispositivo es su autonomía. No importa cuánto dure la batería del Switch, nunca parece suficiente. La buena noticia es que es fácil hacer que dure más. Aquí te decimos cómo.
La pantalla es una de las cosas que más consume batería en los dispositivos móviles y el Nintendo Switch no es la excepción. Por mucho que sea atractivo ver el panel con el brillo completo, entre más luz emita más energía está utilizando. Al igual que con los smartphones y tablets, bajar un poco el brillo puede mejorar significativamente la autonomía.
Así que, si lo tienes al máximo porque estás jugando al aire libre, cambiarte a una zona con sombra y bajarlo un poco significará tener más diversión por más tiempo. Esto es fácil de cambiar: ve a la aplicación de ajustes de sistema y selecciona Brillo de pantalla. Después desactiva el brillo automático y establece el nivel de iluminación que quieres.
Puedes desactivar los motores de vibración, colocados en los controles Joy-Con (para e Nintendo Switch original y versión OLED), para exprimir al máximo la duración de la batería. Aunque la retroalimentación háptica es muy divertida, no es imprescindible para disfrutar de los juegos de Nintendo. Esta es otra tarea para la aplicación de ajustes del sistema. Pero esta vez tienes que seleccionar los Controladores y Sensores. Después en Vibración del control para desactivar la función.
Aquí está otra función que comparte tu Nintendo Switch con tu smartphone: el Modo Avión. Esto permite que sigas utilizando tu dispositivo, pero desactiva la conectividad Wi-Fi y Bluetooth. Adivina dónde puedes activar el Modo Avión... Así es, hay que ir a los ajustes de sistema otra vez. Cabe destacar que también desactiva el uso remoto del Joy-Con y no podrás jugar en línea títulos como Fortnite.
A menos que lo hayas cambiado, tu Switch entra en modo de reposo tras diez minutos de inactividad. Se trata de un estado de bajo consumo, similar al modo de espera del celular o la tablet, que consume mucha menos energía cuando no se utiliza el dispositivo. De nuevo, puedes cambiarlo en los ajustes de sistema y hacer que se ponga en modo reposo más rápido para conseguir más autonomía.
El Nintendo Switch se carga por medio del puerto USB tipo C y eso significa que puedes utilizar un power bank para sacarle más provecho. Y, por supuesto, también puedes cargar otros dispositivos con entrada USB-C. Si no te gusta el tamaño de un cargador independiente, hay varias fundas con batería integrada para el Nintendo Switch. De hecho, en T3 escribimos hace poco sobre el G-Case que tiene esta característica.