Este año no hemos tenido tanto sol como esperábamos, esto ha hecho que muchos de nosotros pasemos por alto la importancia del protector solar, pensando que no es necesario aplicarlo cuando las temperaturas no son tan altas.
Lo creas o no, este es un punto de vista extremadamente negativo, y deberías consultar las 5 razones por las que deberías usar protector solar a diario para tener una piel más sana si desconfías. Los dermatólogos afirman que puede tener efectos peligrosos para la salud de la piel y causar graves daños permanentes. Sin embargo, también hay muchos mitos y rumores por ahí que pueden ser igual de dañinos, uno de ellos es que no es necesario usar protector solar cuando el sol está lejos.
No te asustes. Hemos conseguido hablar con el Dr. Hamdan Abdullah Hamed MBChB, dermatólogo colegiado, que nos ha dado consejos sobre los peligros de la exposición a los rayos UV y ha desmentido 5 de las ideas erróneas más comunes sobre el protector solar.
Aunque la intensidad sea menor que la de la luz solar directa, los rayos UV pueden penetrar a través de las nubes e incluso del cristal. Esto significa que la piel puede seguir expuesta a la radiación, incluso en días nublados o cerca de ventanas en interiores. Para evitar daños en la piel, se recomienda usar protector solar de forma constante, aunque el tiempo parezca menos soleado.
El FPS mide el nivel de protección solar contra los rayos UV. Aunque los FPS más altos ofrecen más protección, la diferencia es bastante pequeña: el FPS 50 bloquea alrededor del 98% de los rayos UV, lo que representa sólo un 1% más que el FPS 30, que bloquea alrededor del 97%. Lo más importante que hay que recordar es que ningún protector solar puede ofrecer una protección del 100% frente a los daños del sol, por lo que hay que seguir tomando otras medidas para protegerse, como llevar ropa protectora y mantenerse a la sombra.
Un bronceado básico sólo proporciona una protección equivalente a un FPS 2-4, lo que no es suficiente para evitar daños en la piel. De hecho, el propio bronceado es un signo de daño cutáneo causado por la radiación UV. Independientemente de que estés bronceado o no, siempre debes tomar precauciones para protegerte del sol, incluido el uso de suficiente protector solar.
El maquillaje o las cremas hidratantes con FPS pueden ofrecer una capa adicional de protección, pero por sí solos no bastan para protegerte de los daños del sol. La cantidad de maquillaje que lleves normalmente no contendrá tanto FPS como necesitas para prevenir los daños. Debido a esto, es importante aplicar un protector solar con SPF adecuado debajo de cualquier maquillaje que uses, incluso si el maquillaje tiene en él.
El protector solar ayuda a protegerse de los rayos UV, pero no es capaz de bloquearlos por completo. Por eso, parte de la radiación UV puede atravesarla y hacer que la piel produzca melanina, que es el pigmento responsable del bronceado. El FPS 15 bloquea alrededor del 93% de los rayos UV cuando se aplica en profundidad. Esto significa que aproximadamente el 7% de los rayos penetran en la piel. El FPS 30 bloquea el 97% de los rayos y el FPS 50, el 98%. Esto significa que podrás broncearse aunque lleves crema solar, pero la cantidad de bronceado será menor.