Pasar una buena noche puede hacer una gran diferencia en tu ánimo y bienestar, además de impactar en tu salud a largo plazo. Los beneficios de un sueño de calidad están tan bien comprobados que apenas vale la pena hablar de ellos aquí. Aunque hay una gran cantidad de trucos que pueden ayudar, desde los más obvios como invertir en el mejor colchón para tu tipo de sueño hasta el más sorprendente (algunas personas que sufren insomnio confían en las mantas pesadas para ayudarles a dormir), hay una técnica que cuesta prácticamente nada y es lo suficientemente rápida y fácil para acoplarse hasta en la rutina más ocupada.
Aquí está: leer por seis minutos antes de ir a la cama cada noche. La técnica está basada en una investigación de la Universidad de Sussex que fue reporteada por The Telegraph en 2009. En el estudio, se encontró que leer un libro redujo el estrés de los participantes hasta 68%; lo que lo hizo en el remedio de desestrés más efectivo que probaron.
La teoría señala que leer funciona tan bien para relajarte porque te distrae de tus ansiedades personales, permitiéndote escapar de tu realidad y entrar en el mundo del autor. De acuerdo con el neuropsicólogo cognitivo Dr. David Lewis, que dirigió el estudio, la lectura permite entrar en un estado alterado de conciencia que relaja el cerebro.
Los investigadores elevaron los niveles de estrés de los participantes mediante una selección de ejercicios y pruebas, antes de pedirles que llevaran a cabo una serie de técnicas de relajación tradicionales, como dar un paseo, escuchar música o tomar una taza de té (aunque esta última quizá no sea la ideal antes de acostarse, en cualquier caso). Se controlaron aspectos como el ritmo cardíaco y la tensión muscular como indicadores de estrés. La lectura resultó ser la más eficaz de todas.
La parte más asombrosa del estudio es que descubrieron que esos bajos niveles de estrés eran evidentes después de solamente seis minutos de lectura en silencio. Eso es lo suficientemente corto para no impactar demasiado en tu rutina diaria. Aunque, por supuesto, puede que acabes ampliando ese periodo si acabas enganchado a tu libro.
Estos resultados fueron respaldados por una encuesta nacional en el Reino Unido en 2021 de Penguin Random House, que encontró que aquellos que leen como parte de su rutina para dormir tienden a dormir mejor, y durante más tiempo, que los que no lo hacen. La lectura también fue calificada como una de las herramientas más eficaces para conciliar el sueño, superando al yoga, al ruido blanco e incluso a los somníferos recetados.