Según se informa, Tesla está trabajando para añadir Apple CarPlay a sus automóviles, en un esfuerzo por impulsar las ventas de sus vehículos. Hasta ahora, la empresa de vehículos eléctricos de Elon Musk había optado por ofrecer su propio enfoque en cuanto al software integrado en los autos.
Muchos conductores buscan la comodidad de Apple CarPlay o Android Auto cuando compran un coche nuevo, lo que les permite utilizar una interfaz familiar, reflejada desde un smartphone.
Tesla se ha resistido a ello a lo largo de los años, ofreciendo su propio sistema de infoentretenimiento y permitiendo una experiencia más integrada para los conductores, diseñada por la marca para destacar sus propias características. Y aunque la marca ha ofrecido su propio sistema, los conductores no se han quedado sin nada: seguía ofreciendo una experiencia conectada completa, que incluía, por ejemplo, el acceso a Apple Music.
Pero según un informe de Bloomberg, eso podría estar a punto de cambiar. Afirma que la marca está buscando añadir el software para automóviles de Apple "en los próximos meses".
Se trata de un cambio de postura total, pero también de algo que va en contra de la opinión de muchas otras marcas de vehículos.
Aunque ofrecer Apple CarPlay y Android Auto se ha considerado durante mucho tiempo una característica esencial, cada vez son más las marcas que están dejando de lado a los gigantes tecnológicos para ofrecer su propio sistema. Eso es algo que GM ha comentado recientemente, por ejemplo, y explica la tibia aceptación de CarPlay Ultra, el sistema para automóviles diseñado para controlar todas las pantallas del vehículo.
BREAKING: Tesla is developing support for CarPlay in its vehicles — finally. Story with @EdLudlow https://t.co/eL9Wyiuj5d
— Mark Gurman (@markgurman) November 13, 2025
Lo que parece haber cambiado es que el rendimiento de Tesla ha sufrido un retroceso recientemente. Electrek informa de un descenso considerable de las ventas en el Reino Unido, el mayor mercado europeo de la marca, mientras que esa tendencia también se ha reflejado en las ventas en Estados Unidos.
Parece que la incorporación de Apple CarPlay es un intento de reforzar la oferta, eliminando una de las barreras que los conductores podrían argumentar a la hora de comprar un automóvil.
En realidad, las ventas dependen de muchos factores, como la popularidad de modelos nuevos o atractivos, la situación económica, la actividad de las marcas rivales y, en el caso de Tesla, la percepción de Elon Musk.
No hay una fecha concreta para la integración de CarPlay, pero se espera que funcione como una ventana dentro del sistema de la marca automotriz. La posible desventaja será la navegación genérica, en lugar de una versión que tenga en cuenta los puntos de carga, por lo que es posible que funciones como el preacondicionamiento de la batería no funcionen si el sistema de navegación del coche no sabe adónde se dirige.
Queda por ver si Apple CarPlay llegará a Tesla, pero sin duda parece un giro de 180 grados después de tantos años de resistencia por parte de la marca pionera en vehículos eléctricos.
